Manuel Zepeda Ramos – ‘EL NUEVO AMANECER’

Inexactitudes mirando al seis de junio

Me da mucho gusto volver a platicar con ustedes. Les deseo que este 2021 les trate bien. Me agrada mucho poder servirles.

Empezamos:

Él, ya está en campaña. Bueno; siempre lo ha estado.

Reconozco que lo hace muy bien. Lo ha aprendido a lo largo de muchos años, aunque esos tantos hayan tenido éxito hasta hace dos años y medio. Algún día lo analizaremos.

El domingo lo dedica a decir lo que se le olvidó -o lo quiere adelantar-, en las muchas horas utilizadas en los Monólogos de la Mañana, de todas las semanas.

Este domingo no fue la excepción.

Se echó, ni más ni menos, la glosa de la aprobación del ejercicio presupuestal para el 2021, con un optimismo tal que da por hecho que va a contar con dinero para llevarlo a cabo…sin pedir, aunque la deuda nacional siga creciendo.

Me imagino que se habrá de pasar por salva sea la parte, cuando ya sea el tiempo perentorio, la disposición del INE de no hacer proselitismo en torno de su actividad cotidiana que pueda ser considerada como propaganda para su partido en pleno ejercicio de sus funciones, por las que juró. Ya veremos, aunque estamos sujetos a lo que «diga su dedito».

Nos dio las cuentas aprobadas por una mayoría absoluta, sobre representada, en cuasi fast track, de una cámara de diputados que ahora, por su condición absolutista y mayoritaria, puede aprobar lo que quiera y como quiera, con solo una orden de Él.

Esas cuentas -como hubiera dicho el doctor Estrada respecto a las estadísticas minuciosas que de los Monólogos de la Mañana lleva y que ya se han vuelto documentos de consulta-, poseen inexactitudes a las que ya nos tiene acostumbrados.

Es significativa la defenestración constante que hace de todos sus enemigos, periódicamente, pero particularmente de la empresa nacional. Si habremos de avanzar en la creación de empleos, habrá de ser de la mano de ese sector nacional que es el que los genera y, con ello, la riqueza correspondiente. La empresa nacional habrá de reflejar ante el extranjero seguridad y tranquilidad, que habrá de animar a los inversionistas para que traigan divisas a México que, por cierto, ya deberían estar aquí para la implementación del T-MEC -¿lo estará considerando su equipazo?- , cuya importancia hoy día es fundamental para nuestras relaciones comerciales con el más importante corredor comercial del planeta, al que pertenecemos. Creo que debería de cuidar esa relación y no generalizar con respecto a la conducta de los empresarios nacionales. Si hay empresarios que cometieron alguna falta en las reglas de contratación y abusado del outsorcing, que se le aplique la ley. Si los hay, debería de proceder.

El arranque de la vacunación, si me lo permiten, fue accidentado.

De entrada, no hay un plan detallado al respecto. Debería haberlo. Serán muchos millones de mexicanos los que estén listos para vacunarse y deberán de saberlo con anticipación. Lo que se ha visto hasta ahora es una tarea desordenada, en donde vemos a gente de la sociedad civil haciendo cola en la calle -incluido a los médicos y enfermeras-, cuando los prospectos inmediatos y preferenciales son, precisamente, los héroes de esta pandemia: el personal de salud que está en la línea de fuego arriesgando su vida y la de su familia.

En la aplicación de las vacunas, se ha empezado en el desorden.

Sin embargo, habrá que darle el beneficio de la duda y pensar que habrá de componerse.

No es cierto que estemos librando la Pandemia.

Mientras escribo este artículo, veo en los noticieros de la mañana hospitales cerrados por saturación total, sin cupo alguno. También veo playas con mucha gente divirtiéndose, sin ninguna preocupación. En los próximos días, desgraciadamente, habremos de tener muchos casos de contagios nuevos, ante un panorama de saturación hospitalaria de la CDMX, de donde son los bañistas irresponsables, la inmensa mayoría, «que se encomiendan a Dios», como le dicen a los reporteros.

A nombre de los médicos, vaya desde aquí mi protesta airada ante tamaña irresponsabilidad.

Anuncia que para el mes de marzo habrán de estar vacunados todos los adultos mayores en donde estamos Cristina y yo y varios miembros de nuestra familia, junto a cientos de miles de mexicanos, para no hablar de millones. Ya hasta nos asignó vacuna, que no es la de Pfizer, la multicitada y recibida en el aeropuerto como reina del carnaval. No. Se trata la de Cansino, la china, la que todavía está en periodo de prueba en México y un reportero ya anunció que Él ya se la puso ¡Coñó! magínese -como dice Él-.

Como ciudadano mexicano ¿aprueba usted que Él ande por todos lados sin cubre bocas, mientras todos debemos traerlo como manera de evitar el pasaporte a la otra vida?

No. Me hace recordar al niño que llevaba el balón a los partidos y había que rogarle para que lo prestara. Es ridículo.

Las inexactitudes son muchas y poco es el espacio.

No olvidemos que son tantas que, en dos años de gobierno, ya superaron a las de Trump que habrá de estar en el poder 4 años, hasta el 20 de enero.

Por todas estas mentiras y las que se acumulen, que habrán de ser muchas, si usted no tiene nada que hacer el próximo 6 de junio, vaya a votar por quien le plazca, menos por los candidatos de Morena y sus aliados. Le haremos un gran bien a la democracia nacional.

¡Ah! Se me olvidaba. No salga. Se va a contagiar y va a contagiar. Eso, querido lector, es asunto de vida o muerte.

Si no se puede evitar, salga con cubre boca y distancia adecuada…y cuídese mucho.

La mejor palabra…la que no se dice:

Acaba de pedirle a Ebrard, en los Monólogos de la Mañana, que se le conceda asilo político a Julian Assange, el fundador de WikiLeaks. No sabe qué ya un juez inglés negó la extradición a Estados Unidos. Digo: estamos arreglando la relación con Joe Biden.

¡El avión! diría Derbez.

¡El clutch! diría yo.