Comunicado|Ciudad de México
El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de ser parte de “la mafia del poder” y apoyar a la oligarquía, luego de que el máximo tribunal suspendió por tiempo indefinido la entrada en vigor del plan B de la reforma electoral.
El mandatario aseguró que “los distinguidos miembros” del Poder Judicial y del Instituto Nacional Electoral (INE) están contra los cambios porque “su único dios es el dinero” y pretenden seguir cobrando elevados sueldos.
“Es la misma mafia”, aseveró López Obrador, y agregó que los integrantes de la SCJN son iguales “que los conservadores, que no quieren que haya democracia, porque ellos son partidarios de la oligarquía, no de la democracia. No quieren al gobierno del pueblo, por eso no quieren la reforma electoral, eso es lo que está sucediendo”, explicó.
La controversia será analizada por el ministro Javier Laynez, que dio curso a la demanda y concedió la suspensión solicitada por el INE.
En tanto, senadores de Morena y el presidente de ese partido, Mario Delgado, sostuvieron que el máximo tribunal se ha puesto al servicio de los grupos conservadores al suspender indefinidamente una reforma electoral que elimina excesos y privilegios con recursos públicos, pero la oposición tampoco debe festejar tanto porque “aunque logren parar en definitiva el plan B”, el movimiento de la Cuarta Transformación ganará las elecciones de este año y 2024.
“Un ministro de la Corte suspendió una reforma aprobada por el Congreso que busca que haya austeridad en el INE, que se evite y castigue la compra de votos” y se eliminen dispendios financiados con recursos que son del pueblo, expresaron.
En entrevista aparte, el senador César Cravioto resaltó que la SCJN es “el refugio del conservadurismo”. Y agregó que el hecho de que el ministro Laynez Potisek suspendiera de forma indefinida la reforma electoral “es una victoria pírrica” para la derecha en el país, que muestra además “lo corrompido que está el Poder Judicial”, al que la mayoría de la población ubica ya como “los personeros de los consejeros del INE y de quienes pretenden seguir beneficiándose de los recursos públicos”.