Por Jorge Ceballos

Eduardo Ramírez Aguilar comenzará a partir de hoy recorridos durante 18 días bajo la figura de precandidato de la alianza ¡Juntos seguiremos haciendo historia!, la cual estará integrada por Morena, PT, PVEM, Chiapas Unido, Mover a Chiapas, RSP y el PES. El aún senador de la República comenzará así su periplo que lo lleve a ocupar el despacho principal del palacio de gobierno a partir del 8 de diciembre próximo.

Estas giras marcarán el inicio de una anhelada campaña electoral que en 2018 se le negó y que hasta la madrugada del 11 de noviembre parecía se le escapaba de las manos por el fantasma de la regla de paridad que Morena tenía que cumplir.

Ahora bien ¿con quienes arrancará Eduardo Ramírez Aguilar este camino con rumbos a la gubernatura? Surge la pregunta porque en los días posteriores a su unción como Coordinador Estatal de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación a su alrededor se han dejado ver gente que en el pasado reciente no han dejado muy buenos recuerdos de su paso por la administración pública.

Alrededor de Ramírez Aguilar y como parte de sus operadores han aparecido personajes como Jorge Enrique Hernández Bielma ex director del Colegio de Bachilleres de Chiapas y quien ha sido señalado de ser partícipe de un descomunal atraco a las arcas de ese subsistema educativo.

De la misma forma un poco más cercano a Eduardo Ramírez aparece José Antonio Aguilar Meza, quien de la misma forma es señalado de irregularidades en su época como director del Colegio de Bachilleres.

Otro cuadro político que es señalado de irregularidades durante su gestión como presidente municipal de Comitán es Luis Ignacio Avendaño Bermúdez, a quien incluso en diciembre de 2015 empleados de aquel ayuntamiento fueron a bloquearle los accesos a un hotel de su propiedad luego que el gobierno que encabezó no dejara en las arcas los recursos para el pago de fin de año.

Es más, a Nacho Avendaño se le ha acusado de ser el principal responsable que en 2015 el grupo Comitán cuya cabeza principal es Eduardo Ramírez, perdiera la alcaldía a manos de Mario Fox.

En ese sentido, si Eduardo Ramírez Aguilar tiene el interés de pasar a formar parte de la historia de Chiapas, bien haría por desmarcarse de varios hombres y mujeres que ven en él la oportunidad de hincarle el diente al presupuesto, de lo contrario la sombra del regreso del pasado estará latente durante cada uno de los días de campaña.

Si en cambio, Eduardo Ramírez insiste en honrar la amistad y las posiciones de grupo lo único que demostrará es que en Chiapas se seguirá premiando a los saqueadores y corruptos que en 2018 fueron vencidos en las urnas… Hasta la próxima.