Agencia El Universal|San Cristóbal de Las Casas

El alcalde de esta ciudad, Mariano Díaz Ochoa, ordenó retirar en la madrugada de este martes, en un operativo con la Policía, los puestos de venta de dulces propiedad de mujeres artesanas que habían colocado en los corredores de la antigua alcaldía que se ubica en el centro histórico, como parte de una tradición de este pueblo mágico.

Al enterarse del operativo, algunos comerciantes llegaron a los corredores de la antigua alcaldía y que hoy es el Museo de la Ciudad (Musac), donde vieron que sus puestos habían sido retirados por decenas de elementos de la Policía Municipal.

Los comerciantes aseguraban que contaban con el permiso del Concejo Estatal de las Culturas y las Artes (Coneculta) para instalarse momentáneamente en los corredores del Musac, por lo que se molestaron con el operativo que provocó pérdidas en su mercancía.

Los muebles y los dulces tradicionales fueron subidos en patrullas hacia la comandancia de la Policía Municipal.

Al borde del llanto, los comerciantes recriminaron a los policías que los hayan sacado de los corredores del Musac sin previo aviso, pues contaban con autorización de las autoridades estatales para vender sus productos como parte del año nuevo.

Tradicionalmente, las mujeres vendedoras de dulces han acostumbrado instalarse por unas horas en los corredores de la antigua alcaldía, principalmente en el año nuevo y en el día de Corpus Christi, en junio.

Los comerciantes pidieron que les pagaran por los daños que provocaron los agentes de la Policía durante el operativo de esta madrugada. Algunos familiares de las vendedoras tuvieron algunos altercados con los mandos que encabezaron el operativo, pero no pasó a más.

Dulces y algunos enseres habían quedado tirados en el piso, como resultado del operativo de la Policía.

 

Comerciantes encaran a presidente municipal

Por la mañana del martes, al conocerse que el alcalde Mariano Díaz Ochoa, que se encuentra al frente de la alcaldía por tercera vez, presidía una la sesión ordinaria de cabildo, llegaron a encararlo y decirle que desde el mes de diciembre contaban “con permisos” para poder vender en los pasillos del Museo, pero el presidente municipal alegó que no era cierto. “No sea mentirosa”, le gritó a una comerciante.

Ya cuando se retiraba, Díaz Ochoa respondió de manera violenta y agresiva. “Vienen a que yo les miente la madre”, les dijo a las mujeres, pero estas respondieron que era un “misógino”, “violento” y “machista”.

El 15 de diciembre, el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC) sancionó a Díaz Ochoa por violencia política de género.

Todo inició septiembre del año pasado, cuando Díaz Ochoa ordenó quitarle la facultad de firmar los cheques para obras, gastos y otros, a la síndica Victoria Ruiz Olvera, acto que estuvo avalado por los regidores, por lo que el tesorero tuvo que acatar la decisión del presidente municipal.

Como consecuencia, Ruiz Olvera denunció este hecho y fue el 15 de diciembre que el IEPC sancionó al alcalde Díaz Ochoa y regidores por violencia política de género. Sus nombres fueron inscritos en un padrón como violentadores de derechos políticos en contra de mujeres y pidió que tomaran talleres para erradicar la violencia contra las mujeres.