Ciudad de México
Emma Coronel Aispuro, esposa del narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, se declaró el jueves culpable de cargos penales federales tras haber sido acusada en Estados Unidos de ayudar a su esposo a dirigir un imperio multimillonario de tráfico de drogas.
En una audiencia de más de una hora en la ciudad de Washington, que se transmitió también por teléfono, Aispuro se declaró culpable de tres delitos: asociación ilícita para traficar cocaína, metanfetaminas, heroína y marihuana; lavado de dinero y participación en transacciones de propiedades pertenecientes a un narcotraficante.
Lo adelantó The New York Times
The New York Times adelantó que la declaración de culpabilidad. Precisó que no exige a cambio una colaboración de Coronel con la justicia estadounidense para revelar detalles del narcotráfico liderado por su marido.
Coronel, de 31 años, fue arrestada en un aeropuerto internacional cercano a Washington el 22 de febrero bajo sospechas de estar involucrada en los negocios de narcotráfico de su marido y de intentar ayudarle a escapar de prisión en México. Está detenida desde entonces.
Su marido Joaquín «Chapo» Guzmán, considerado el narcotraficante más poderoso del mundo antes de ser extraditado desde México a Estados Unidos en 2017, fue sentenciado a cadena perpetua en julio de 2019 por enviar toneladas de droga a Estados Unidos a lo largo de 25 años.
“El Chapo”, de 64 años, cumple su condena en la cárcel federal de mayor seguridad del país, la prisión ADX en Florence, Colorado.
Corte de Washington DC la acusó de conspiración
La exreina de belleza, madre de dos niñas mellizas que tuvo con el Chapo, fue acusada en una corte de Washington DC de conspiración para distribuir en Estados Unidos un kilo o más de heroína, cinco kilos o más de cocaína, una tonelada o más de marihuana y 500 gramos o más de metanfetaminas.
Además, es acusada de colaborar en dos complots para ayudar a Guzmán a escapar de prisiones mexicanas. Enfrenta una sentencia mínima de 10 años y un máximo de cadena perpetua, pero su declaración de culpabilidad puede acortar su condena.
Durante el histórico juicio del Chapo en Nueva York, y con ella presente en la sala, Dámaso López Núñez, alias «Licenciado», exjefe de una cárcel mexicana que luego trabajó para el Chapo y colaboró después con la fiscalía, contó cómo Coronel ayudó a su marido a escaparse del penal del Altiplano en 2015, en motocicleta por un túnel de 1,5 km, y a planificar una segunda fuga tras su captura un año después.
Otra vez, los fiscales revelaron mensajes de texto en los que el Chapo pide a Coronel que esconda sus armas antes de un operativo policial.
La acusación difundió asimismo una llamada interceptada entre Coronel y «El Chapo», en el que ésta le pasa el teléfono a su padre, Inés Coronel Barreras, que también integraba el cartel de Sinaloa, para que el Chapo le aconseje sobre un cruce de drogas por la frontera con Estados Unidos.