Ciudad de México
Al menos 140 personas murieron en el cayuco que naufragó el pasado viernes tras sufrir una explosión en aguas de Senegal cuando intentaba llegar a las españolas islas Canarias, informó hoy la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
«Al menos 140 personas se han ahogado después de que una embarcación que transportaba a unos 200 migrantes se hundiera frente a la costa senegalesa, el naufragio más mortífero registrado en 2020», constató la OIM en un comunicado.
Según medios de comunicación, las Marinas senegalesa y española y los pescadores que se encontraban en la zona, rescataron a 59 personas y se hallaron los cuerpos de otras 20, agregó la organización.
«Hasta hoy se siguen encontrando cuerpos (…). Después de varios días, podemos pensar que esas personas ya no están vivas», declaró a Efe el jefe de la misión de la OIM en Senegal, Bakary Doumbia.
Aunque el Gobierno senegalés aún no facilitado cifras oficiales de cuántas personas iban a bordo de la embarcación, Bakary Doumbia señaló que el dato de unos 200 pasajeros fue comunicado a la OIM por su red de informadores que se hallan en las zonas de salida de migrantes.
Según declaró hoy a Efe el jefe de comunicación de la Dirección de Información y Relaciones Públicas de las Fuerzas Armadas de Senegal (DIRPA), el teniente coronel Saliou Ngom, todavía no hay cifras oficiales, porque se está a la espera de la «conclusión de la investigación».
Por su parte, fuentes de la Guardia Civil española en Dakar dijeron que, por ahora, no se les han facilitado cifras oficiales sobre fallecidos y personas que viajaban en el cayuco.
Según manifestó el presiente de Senegal, Macky Sall, en su cuenta de Twitter el domingo pasado, la tragedia «causó la pérdida de más de diez jóvenes».
De acuerdo con el alcalde de la ciudad senegalesa de Saint-Louis (norte), Mansour Faye, trece jóvenes de esta localidad habrían perdido la vida, según informaron los medios locales.
Fuentes de la Guardia Civil, que junto a la Policía española mantienen un dispositivo mixto en Senegal para controlar fronteras y flujos migratorios desde 2006, indicaron que está habiendo «muchos intentos» por todo el país de llegar a Europa, y al menos tres cayucos han alcanzado las islas Canarias en los últimos meses.
Por su parte, Doumbia manifestó que «esta antigua ruta de migración está siendo cada vez más utilizada y es necesario tomar precauciones para luchar contra el problema».
Para él, este aumento en las últimas semanas se debería al cierre de las fronteras terrestres debido a las medidas para luchar contra la Covid-19 en aquellos países que suelen ser puntos de salida y tránsito de migrantes que intentan llegar a Europa desde la región.
El gobierno senegalés indicó esta semana que «observa con pesar el aumento de la inmigración clandestina por mar» y, tras interceptarse cinco embarcaciones entre el 7 y el 25 de octubre, anunció el refuerzo de las operaciones de vigilancia marina.
Según la OIM, sólo en septiembre 14 barcos que transportaban a 663 migrantes partieron de Senegal hacia las islas Canarias.
De estas salidas, se informó de que el 26% habían experimentado un incidente o un naufragio.
Contando el naufragio del pasado viernes, en 2020 han muerto en esta ruta al menos 414 personas, a diferencia de las 210 muertes registradas en 2019, precisó la organización internacional.
Según el Proyecto «Migrantes Desaparecidos» de la OIM, se estima que ha habido unas 11 mil llegadas a las islas Canarias este año en comparación con las 2 mil 557 del mismo período el año pasado.
En 2006, durante la conocida como «crisis de los cayucos», llegaron más de 32 mil personas, que partían en barcos tradicionales de pesca, principalmente desde Senegal, Mauritania y Marruecos.